Y vosotros… ¿qué habéis hecho para luchar contra el confinamiento al que hemos estado sometidos durante muchos días a lo largo de este último año? Ahora que se cumple el primer aniversario de la llegada del coronavirus a España, toca hacer balance acerca de si hemos sabido aprovechar el tiempo durante los últimos diez meses del 2020 y los dos primeros de 2021. Opiniones las habrá para todos los gustos, pero lo que es indudable es que quien se haya aburrido lo ha hecho porque ha querido. Opciones hay para disfrutar… y de sobra.
Quien haya apostado por la cultura ha salido ganando durante todo este tiempo. El consumo de películas, de novelas, de series… ha sido una de las mayores salvaguardas de los españoles y las españolas en estos tiempos tan duros. El confinamiento domiciliario primero y luego medidas como los confinamientos perimetrales o el toque de queda nos han conducido a pasar en casa la mayor parte de nuestro tiempo. Y eso ha sido sinónimo de depender en buena medida de nuestros recursos culturales para salir adelante y burlar al aburrimiento, uno de los grandes enemigos en los tiempos en los que nos movemos.
Una noticia publicada por el diario El Mundo en su página web el 26 de marzo de 2020 ofrecía algunas alternativas para evitar el aburrimiento por parte de familias enteras. ¿Las cuestiones que se proponen? Cine, literatura, arte y música. En líneas generales, cultura. Es curioso que un sector que ha sido tan vilmente golpeado haya sido el que nos haya permitido sobrellevar de una forma mucho mejor un momento tan duro como el que venimos pasando desde que, en el mes de marzo del año pasado, se desatara la catástrofe en el interior de nuestras fronteras.
El sector cultural bien merece que se le haga un monumento cuando haya pasado el coronavirus y todos y todas tengamos la salvaguarda de la vacuna en nuestra sangre. Durante todos estos meses, ha sido el cine el producto más consumido por parte de millones y millones de personas no solo en España, sino en todo el mundo. En lo que tiene que ver con nuestro país, la producción de películas (265 en el año 2018 y 266 en el año 2019, las cifras más altas, al menos, desde el año 2008 según nos muestra la gráfica que os enlazamos de Statista) ha sido un factor diferencial a la hora de cuidar de nuestra salud psicológica durante todo este tiempo.
Porque sí, ha sido nuestra moral una de las cuestiones que había que mantener alta en todo momento durante la pandemia. Lo peor que nos podía pasar era caer en la ansiedad, en el estrés o en la desazón mientras las sucesivas olas se iban produciendo. Y ha sido imprescindible que tuviéramos a manos diversos productos culturales para intentar mantenernos entretenidos y no sucumbir ante la cantidad de malas noticias que hemos ido recibiendo a medida que pasaban los días y las semanas.
Recientemente, hemos descubierto que el aumento del consumo cultural (en especial de las películas) que ha provocado el confinamiento ha hecho que se produzca un aumento del número de proyectos filmográficos en este 2021. La noticia la hemos recibido de una manera que no nos esperábamos, a través de los profesionales de Trámites Fáciles Santander, quienes nos han comentado que se ha producido un aumento muy notable en la cantidad de productoras que han arrancado todos los trámites laborales y fiscales para llevar a cabo este tipo de iniciativas. Sin duda, se trata de una noticia estupenda y que debemos celebrar.
Un sector que merece respeto
Teniendo en cuenta lo que os hemos comentado en el párrafo anterior, es evidente que debe producirse un aumento del respeto que se le tiene a la industria del cine español, que muchas veces es despreciada incluso por nosotros mismos, los ciudadanos de este país. España siempre ha sido un lugar en el que la cultura ha jugado un papel importante en el desarrollo de la sociedad y no podemos permitir que eso deje de ser así. No se nos ocurre una situación peor que esa para los días que están por venir a nuestro país.
Si no respetamos nuestra cultura y el trabajo que tanta gente hace en España para tener a vuestra disposición películas, series o novelas, está claro que tenemos mucho terreno perdido. Todo lo que se produce en España en este sentido tiene mucha más calidad que lo que solemos pensar. Es cierto que hay grandes transatlánticos de la cultura como Estados Unidos que nos suelen invadir con la cantidad de películas que de allí proceden, pero eso no es óbice para que siempre tengamos en consideración aquello que tenemos más cerca y que debe ser uno de nuestros más grandes motivos de orgullo.