Dicen que de las grandes crisis se sale reforzado. Y el coronavirus, un nombre que hace años no entraba en nuestra cabeza, ha dado un vuelo a la vida de todos. Han sido más de dos años donde se ha marcado un antes y un después. Nada volverá a ser igual. La lástima es que por el camino se han perdido muchas personas, y esas vidas nunca volverán. Pero la vida sigue, y lo que tenemos que hacer es echar la mirada hacia adelante. Es tiempo de adaptarnos a la situación nueva. Sobre todo en los puestos de trabajo, ya que la pandemia ha provocado un cambio de hábitos.
Aunque dicen que ya no existe, el covid-19 ha llegado para quedarse. Es cierto que gracias a las vacunas, esas de que de manera milagrosa se consiguieron en apenas meses, hemos avanzando mucho, pero todavía se siguen muriendo personas por este virus e incluso las secuelas son muy duraderas. Por eso, no hay que bajar la guardia y prepararse bien, sobre todo en los puestos de trabajos que es donde pasamos la mayoría del tiempo. Las oficinas de trabajo pueden adaptarse al coronavirus implementando algunas medidas de seguridad y prevención, que te vamos a mostrar.
Trabajar desde casa
El teletrabajo tuvo su momento culmen en 2021, pero es cierto que años después ha bajado. Si es posible, se puede permitir a los empleados trabajar desde casa para reducir la cantidad de personas en la oficina. Las empresas deberían volver a esta apuesta, aunque cada vez menos.
Programar un horario escalonado
El departamento de recursos humanos debe establecer horarios escalonados para los empleados para disminuir la cantidad de personas en la oficina al mismo tiempo. Es la mejor fórmula. Se ha comprobado que el acumular personas en el mismo lugar es el causante de que los virus fluyan, por eso, hacer turnos de trabajo es una buena opción.
Proporcionar equipo adecuado
También depende del departamento de recursos humanos, pero hay que proporcionar equipo de protección personal (EPP) como máscaras faciales, guantes y desinfectantes para manos. Ahora ya no se usa tanto, pero si tenemos la menor duda de que puede ocurrir un caso de coronavirus, hay que actuar con mano dura.
Distanciamiento social
Fueron dos de las palabras claves durante los peores meses de pandemia: distanciamiento social. O lo que es lo mismo, limitar la cantidad de reuniones en persona y establecer un espacio de trabajo seguro que cumpla con las pautas de distanciamiento social. En este caso se puede apostar perfectamente por las vitrinas o las mamparas de vidrio, que como nos reconocen en Delbin, se ha convertido en uno de los productos más vendidos para las empresas. Y es que es ideal poder contar con un espacio privado para cada trabajador. Esto permite también cubrir las necesidades de aislamiento acústico de los clientes y trabajadores sin tener que comprometer la salud y con un diseño perfecto.
Limpieza y desinfección
Pero ante todo y sobre todo, se ha demostrado que los virus de este tipo, se combaten con limpieza y desinfección. La norma de lavarse las manos parece que fue mítica. Por eso, en las empresas hay que establecer un horario de limpieza diario y regular de la oficina con productos de limpieza desinfectantes. Es curioso que ahora ya cuando entramos en las empresas ya no nos damos el gel para desinfectar. La verdad es que es una pena comprobar cómo con el paso del tiempo nos olvidamos de la mayor tragedia.
Comunicación clara
Si algo hemos visto durante la pandemia es que no teníamos ni idea de a lo que nos enfrentábamos. Nos dimos cuenta de que no sabíamos nada sobre casos de pandemia, y sobre todo, que necesitábamos información. Por lo tanto, informar claramente a los empleados las pautas y procedimientos de seguridad para mantener un entorno laboral seguro.
Promoción de la higiene
Por último, hay que fomentar la práctica de lavarse las manos regularmente y cubrirse la boca al toser o estornudar. Cosas que hace años no podíamos ni pensar y que ahora se tiene que hacer de manera obligatoria en la empresa.
Estas son solo algunas de las pautas que se deben seguir en las empresas y en los puestos de trabajo para adaptarse a la nueva normalidad. EL covid-19 nos hizo mucho daño y es el momento de no dar un paso atrás y no olvidar. Muchas familias han perdido miembros y ahora hay que seguir hacia delante.