Cuando tenemos un problema en la cavidad bucal, las muelas o dientes requieren de una visita al dentista. Eso es por todos conocido. A parte de que sin duda, el mejor tratamiento es la prevención, no siempre funciona y por razones diversas tenemos que acudir al dentista.
Los tratamientos son variados, según el problema o necesidad de cada paciente, el dentista aplicará uno u otro. Desde una simple extracción de muelas hasta una completa ortodoncia.
De lo que menos se habla, salvo que sufras en primera persona la experiencia, es de los tratamientos y recomendaciones posteriores a cada tratamiento. Es como si una vez sacado el diente (o realizado el tratamiento pertinente) se acabó el problema. Sin embargo, conviene tomar unas ciertas medidas y precauciones para evitar posibles complicaciones.
Los profesionales de HQ Tenerife nos han explicado como deben ser algunas de esas medidas. Por lo general, todos los tratamientos coinciden en algunos puntos, pero otros, requieren de cuidados más específicos.
Después de la colocación de implantes o tras una cirugía
Las cirugías más comunes dentro del campo de la odontología, son las relativas a las muelas del juicio; extracciones y colocación de implantes dentales; cirugía de las encías debido a enfermedad periodontal; injerto de hueso o las cirugías periapicales para eliminar la infección que afecta a la raíz del diente y los tejidos circundantes.
Por norma general, los cuidados posteriores y las recomendaciones a seguir en estos casos son comunes. Hay que tener en cuenta que las molestias propias generadas por la cirugía, como la inflamación o el dolor, pueden aparecer durante los tres días posteriores. El tratamiento prescrito por el dentista, ayudará a que esas molestias desaparezcan.
Para paliar esas molestas y procurar una buena recuperación que nos aleje de las complicaciones es conveniente seguir estas medidas postoperatorias:
- Aplicar frío mediante el uso de hielo o bolsas de gel en la parte externa. Hacer esto durante periodos de diez minutos. Ayudará a aliviar el dolor y bajar la inflamación.
- No quitar la gasa que te han colocado en el dentista hasta que pase el tiempo que el mismo te indicará. Generalmente entre quince y treinta minutos. Ayuda a frenar la hemorragia y procura una buena cicatrización.
- Nada de utilizar el cepillo de dientes durante las veinticuatro horas siguientes. Puedes abrir la herida y contribuir a la entrada de bacterias.
- Realizar enjuagues de agua con sal. Los colutorios están prohibidos hasta nueva orden.
- Procurar dormir de manera que la zona intervenida no descanse sobre la almohada.
- Si por la razón que sea, la herida sangra, aplicar una gasa estéril de forma que haga tapón y dejarla por un espacio de veinte minutos.
- Cuando hayan pasado veinticuatro horas, puedes lavarte los dientes con cuidado de no tocar la zona. Conviene hacer enjuagues con clorhexidina para desinfectar.
- Evitar fumar, hacer esfuerzos o agacharte durante una semana.
- En el caso concreto de los implantes, evitar tocarlos con los dedos durante al menos seis semanas.
Recomendaciones después de una endodoncia
Practicar una endodoncia suele llevar el añadido de la posterior reconstrucción de la pieza. Por esa razón las recomendaciones posteriores son ligeramente diferentes:
- En primer lugar, antes de ingerir alimentos que haya que masticar, esperar a que pase la anestesia. Esto es más que nada para evitar que uno se muerda a si mismo.
- No es nada recomendable masticar alimentos duros. Durante el tiempo que exista entre la endodoncia y la reconstrucción final de la pieza, lo mejor es proteger la misma de otras posibles fracturas o daños.
- Atención al hilo dental. Su uso debe ser muy cuidadoso en el diente afectado y los circundantes para evitar el deterioro o la caída de la reconstrucción provisional si se hubiese practicado.
- Tomar la medicación prescrita.
Para después de la limpieza dental
Las limpiezas se consideran como tratamientos momentáneos que no causan molestias ni deben tener cuidados posteriores. La realidad es otra. Cuando te hacen una limpieza dental, están eliminando de la dentadura todo aquello que no debe estar ahí, bacterias y placa incluidas. A veces la profundidad de la limpieza puede genera molestias.
- Tras el tratamiento, las encías pueden presentar mayor sensibilidad por lo que es recomendable y preferible, utilizar pasta de dientes específica para el caso.
- Tanto escupir como enjuagar la boca no es prudente durante las veinticuatro horas siguientes.
- Es posible que las encías sangren en algunos puntos. Hay que prestar atención si no cesa.
- Esperar entre treinta y sesenta minutos para ingerir alimentos o bebidas.
- La boca estará muy sensible a la temperatura por lo que es mejor no ingerir bebidas muy calientes o muy frías. Así como evitar alimentos y bebidas ácidos o abrasivos.
- Caramelos, chucherías varias, alimentos duros o frutos secos, descartados durante al menos un día.
- Utilizar un cepillo de dientes de tipo suave para no dañar el esmalte que estará como ya se ha mencionado, más sensible.
Estas son las recomendaciones y los tratamientos post operatorios más comunes en el campo de la odontología. No obstante, lo mejor es hacer caso a tu dentista que te dará las pautas más acordes a tu tratamiento concreto y tendrá en cuenta tu historial personal.