Muchas mujeres optan por el kickboxing para aprender defensa personal. También se puede practicar como ejercicio, ya que aporta múltiples beneficios.
Este deporte reduce el estrés, permite incorporar nuevas técnicas de respiración y fortalece la autoestima. Está formado por tres bloques, el sistema defensivo consiste en desplazamientos para salir de la trayectoria de los golpes del rival, paradas, bloquear los movimientos del rival…
Por otra parte tenemos las técnicas de puño y pierna. «El trabajo del tren superior, aunque en su mayor parte es boxeo, dependiendo de la modalidad incluye habilidades de otras disciplinas como el giro de puño o las técnicas de codo», dice Javier Molina, maestro de kárate, kickboxing, defensa personal y kobudo.
En el caso del tren inferior se adoptan diferentes formas de pateo, ya que podemos encontrar la patada frontal, la circular o la lateral.
Es muy importante que el preparador físico adapte el entrenamiento a cada persona, así se evitarán lesiones. A continuación, te explicamos los beneficios del kickboxing:
-Mayor flexibilidad, fuerza y equilibrio.
-Incremento de reflejos y velocidad de reacción.
-Mejora de la psicomotricidad y la coordinación.
-Reduce el estrés y mejora la autoestima.
-Mejora la concentración y confianza.
Se recomienda practicar este deporte desde los 12 años en adelante . «Aconsejo que antes se practiquen otras disciplinas como el kárate o el taekwondo», comenta Molina.
Las clases comienzan con un calentamiento aeróbico para activar poco a poco el ritmo cardíaco y para evitar lesiones.
Después se tonifica el tren superior, la franja abdominal y el tren inferior. Las clases terminan con los estiramientos. Es aconsejable llevar las manos y las muñecas bien vendadas, lo que se puede hacer antes del calentamiento.
El desarrollo del entrenamiento puede ser individual, en parejas o en grupos. También se puede utilizar material complementario como manoplas, palos, saco y escudos de golpeo.
La rutina de un competidor será completamente diferente a la de alguien que solo entrene por hobby. «Se daría por hecho que su nivel tanto físico como técnico es alto y puede asumir una carga de trabajo superior, específicamente orientada a mejorar su rendimiento durante asaltos a máxima intensidad», explica Molina.
Puedes llevar pantalones cortos o ‘shorts de thai boxing’, así como largos de ‘full contact’. «Ambos deben tener la suficiente holgura para desarrollar las técnicas de pierna con soltura», aclara Molina.
También será necesario llevar guantes, espinilleras o tibiales para proteger las piernas y los pies, vendas, protector bucal, coquilla, casco y un protector de pecho en el caso de las mujeres.
«El kick boxing es desestresante, toda la cantidad de adrenalina que expulsamos con este deporte nos vendrá fenomenal para terminar un día complicado o rutinario, acabaremos la sesión totalmente relajados, la mejor forma de terminar el día. Las endorfinas que liberamos practicándolo hacen que disminuya cualquier dolor que padezcamos y nos ayudan a combatir el estrés y la depresión, por lo que es un buen canalizador de nuestras tensiones y preocupaciones diarias», informa El Mundo Deportivo.
Si quieres combatir el estrés también pues optar por el Mindfulness. Los profesionales de Escuela de Crecimiento, expertos Mindfulness que ofrecen formación en nuevas constelaciones familiares, explican que esta disciplina reduce el estrés, la ansiedad, mejora la calidad del sueño y reduce el riesgo de depresión.
No puedes meditar con el cuerpo tenso, por lo que es aconsejable invertir unos minutos en relajarte antes de meditar. También es importante utilizar ropa cómoda y de deporte.
Te puedes sentar y apoyar las manos en las rodillas. Otra opción es tumbada en el suelo boca arriba, con las piernas ligeramente abiertas y un brazo a cada lado del cuerpo, con las palmas de las manos mirando hacia arriba.
Las personas que meditan experimentan menos estrés, mejor autoestima, mayor creatividad y más estabilidad emocional. Meditar 15 minutos a diario es suficiente, pero debes encontrar un lugar tranquilo donde no te molesten.
Varios estudios han descubierto que las embarazadas que practican esta disciplina tienen menos estrés y también hay una reducción de las complicaciones de la gestación.
Esta técnica permite que la madre esté bien y relajada, porque si la madre no está bien o sufre depresión, puede afectar al desarrollo del bebé, incluso, hasta en el tamaño.
La meditación, practicada de forma diaria, ayuda a disminuir el cortisol (hormona del estrés) y aumenta el flujo de la hormona de la felicidad, que es la serotonina.
También mejora el sistema inmune y reduce los riesgos de que la madre sufra depresión postparto. Las mujeres que practican mindfulness sufren menos partos prematuros, que las que no llevan a cabo esas prácticas.
Esta técnica de relajación se está implantando en muchos colegios, así que los alumnos aprenden a regular las emociones, a reducir el estrés y a controlar los impulsos.